La contratación de empresa de reformas para el hogar no es algo que sea fácil, por eso creemos que puede ser de utilidad contar con unos sencillos consejos al respecto, pues en mi caso tuve que reformar la casa y algo de experiencia he tomado en este campo.
En el caso de que tengas una casa que ya tenga una serie de años, seguro que antes o después te va a tocar hacer una reforma en este sentido.
¿Cómo se elige una empresa de reformas que sea de calidad?
Nosotros no teníamos demasiada idea de donde nos metíamos, pero si que creíamos que había llegado el momento de reformas la casa y en este sentido tuve la suerte de que mi madre hacía poco que hizo su reforma y nos gustó como quedó, por lo que contactamos con reformalacasa.es una empresa de aquí de Valencia y nos comentaron lo que se podía hacer.
En este caso partíamos de una ventaja, pero de no ser así, habría sido todo algo más complicado. Como me tocó leer algo en revistas y también seguí un poco el proceso que tuvieron que pasar mis padres, ahora puedo comentároslo así de forma breve,
Los proyectos de reforma y su importancia
Es fundamental saber lo que se quiere y lo tener claro que en las reformas hay que gastarse dinero si se quiere tener una reforma de verdadera calidad.
Por este motivo es bueno la definición de lo que se quiere para conseguir esa casa que quieres.
Es bueno hablar con la empresa que sea la elegida y comentarle lo que se quiere y qué se puede hacer con el presupuesto con el que cuentas, de tal forma que así sea más sencillo lograrlo.
En el caso de que la reforma tenga gran complejidad, lo mejor es optar por profesionales que te puedan ayudar con la reforma del proyecto, pero si se quiere optar por cosas más sencillas, a veces incluso puedes hacerlo por tu cuenta.
De qué forma elegir la empresa
En cuanto tengas claro lo que quieres, hay que elegir una empresa y pedirle presupuesto.
Lo ideal es que al menos sean tres las empresas para poder elegir.
La empresa que se dedique tiene que también coordinar a los distintos oficios que vayas a necesitar, de lo contrario va a ser una locura para ti tener que elegir y contratar a cada albañil, pintor, etc.
Piensa que si hay algo que se hace mal, puede que nadie quiera tener la responsabilidad en este sentido y te va a tocar averiguarlo. Esto al final es tiempo que vas a tener que dedicar.
En el momento en que se contrata a una empresa que lo vaya a gestionar todo, son ellos los que van a terminar de organizar a los empleados y establecer el calendario de trabajo. Si hay problemas, serán los que se hagan cargo y lo solventen en tu nombre.
Comprobar las opiniones que tengan los clientes
Como a mí me pasó, es bueno que si cuentas con algún familiar al que recientemente le hayan hecho alguna reforma le preguntes si ha quedado satisfecho del trabajo realizado.
Ahora, gracias a Internet, también es posible obtener información de empresas, por lo que esta labor investigadora es más sencilla que nunca. Sacar provecho de ello merece la pena.
Pedir ejemplos de trabajos que hayan hecho antes
Está claro que la experiencia importa, por lo que es bueno solicitar presupuesto a empresas que se dediquen a la reformas y que no sean unos recién llegados. Así te van a poder mostrar un portfolio donde aparezcan las obras que hayan hecho con anterioridad, una forma magnífica de saber de lo que son capaces.
Siempre el presupuesto convenientemente desglosado
Este punto es importante, pues merece la pena que les pases un presupuesto en blanco paras que lo rellenen. En el caso de que no lo hagas, lo mejor es pedir un presupuesto que sea pormenorizado en este sentido.
Un presupuesto que sea vago y generalista lo que puede hacer es que cometas errores. Puedes llegar a pensar que hay algo que se puede hacer y luego encontrarte con que no se había incluido y que no se había explicado lo suficientemente bien.
Deseamos que todos estos consejos que te hemos dado valgan para que puedas hacer lo mejor posible la reforma que tengas entre manos. Sabemos que es un esfuerzo bastante grande en lo económico y no es la mejor ideal dejar todo esto en manos de gente que no sea profesional.
