Hemos padecido los efectos de la pandemia más mortífera en el último siglo. El coronavirus no solo nos ha dejado una cantidad tremenda de fallecidos y de personas que han sufrido problemas de salud derivados del contagio. También ha provocado que haya habido una gran cantidad de empresas que han tenido que bajar sus persianas de manera definitiva y que muchísimas personas se vieran perjudicadas en materia económica por el hecho de que sus empresas decidieran pausar temporalmente su actividad. Muy pocas personas en España habían pasado por una situación similar. No ha sido fácil para nadie, desde luego.
Especialmente triste ha sido ver cómo ha afectado este asunto a las personas mayores, que han sido las que más peligro han corrido ante los efectos del coronavirus. La mayoría de los fallecidos han sido personas de más de 65 años, personas que nacieron en un momento complicado de la historia de nuestro país, que seguramente pasaron hambre cuando fueron pequeños y pequeñas y que han tenido que ver cómo un virus ha terminado con sus vidas en el momento en el que, al fin, les había tocado descansar tras una cantidad tremenda de años trabajados.
Como consecuencia de todo lo que ha pasado, muchos profesionales de diferentes sectores han buscado soluciones a los efectos de la pandemia. La más conocida, como seguramente ya sepáis, es la vacuna, que ha permitido salir del atolladero en el que estábamos metidos desde el mes de marzo de 2020. Pero también han existido diferentes maneras, al margen de la vacuna, de combatir contra la pandemia y contra los efectos del COVID-19. Una de ellas es la conocida como haloterapia, que ha ido ganándose un hueco entre muchas personas y que se ha convertido en una opción de referencia para buena parte de la sociedad española.
No es de extrañar que, para las personas mayores, la haloterapia haya sido una de las opciones preferidas para conseguir sentirse más a salvo. En la página web 65 y Más se hablaba de los efectos de la haloterapia entre las personas, haciendo referencia especialmente a que mejora y limpia las vías respiratorias, como sabéis era una de las vías de entrada del virus en nuestro cuerpo. Además de eso, la haloterapia también elimina toxinas y puede provocar que desaparezcan diferentes patologías que afectan a nuestra piel. Como ya estáis viendo, son todo ventajas y no podemos permitirnos el lujo de no usarlas.
Combatir cualquier posible efecto de la pandemia ha sido la máxima de las prioridades para las instituciones y los sanitarios en España en los últimos dos años por motivos obvios. Y lo cierto es que se ha cumplido con el objetivo, porque ya hemos dejado atrás la pandemia o, al menos, así lo parece por los datos que estamos recibiendo en los últimos meses. Los medios de comunicación ya no hablan tanto de la pandemia y nosotros hemos querido aprovechar este espacio para hacer referencia a que todavía hay mucha gente que sigue tomando precauciones para evitar ya no la muerte, sino los efectos del virus que hacen peor la vida de las personas. Los profesionales de Saltium nos han indicado que la haloterapia viene siendo una de las opciones preferidas para este tipo de personas.
La sal, la mejor de las aliadas
Y es que un elemento como lo es la sal es una gran aliada para mejorar nuestra protección ante el coronavirus. El motivo es el que comentábamos más arriba, que ayuda a liberar las vías respiratorias contribuyendo de ese modo a que existan muchas menos opciones de que padezcamos algún problema respiratorio.
Como consecuencia de todo esto, son muchos los expertos que ya recomiendan la haloterapia y no solo en España, sino en otros lugares del mundo. Sin duda, estamos hablando de uno de los asuntos que más nos ha permitido avanzar en seguridad ante la pandemia y tenemos que congratularnos por el hecho de poder disponer de él en un periodo en el que, aunque hayamos superado los peores momentos de la pandemia, todavía hay personas que tienen miedo y con razón. No nos extraña en absoluto después de todas las cosas que hemos visto y escuchado a lo largo de los dos últimos años.
Es evidente que la situación ha mejorado y mucho con respecto a otros momentos. Sin embargo, un cuidado extra para soportar cualquier problema de salud (por mínimo que sea) derivado del coronavirus es vital. Y la haloterapia se ha destapado como uno de los más efectivos. Hay que seguir trabajando en esa línea y haciendo posible que cada día más personas descubran los beneficios de la sal para que el cuerpo pueda estar preparado ante esos males. Nos hará ganar en seguridad y en calidad de vida.