Una buena salud dental es imprescindible para conquistar la felicidad

Todas aquellas personas a las que de verdad les importa su salud diseñan estrategias dedicadas a conseguirla y a prevenir cualquier tipo de mal físico o mental que la pueda poner en riesgo. Hay diferentes maneras de enfrentarse a esto: las hay que son mucho más dependientes de su médico de cabecera y las hay que suelen obtener información a través de diferentes fuentes escritas y fiables. El objetivo, eso sí, es el mismo: que nada se pueda interponer entre nosotros y la felicidad que siempre hemos deseado conseguir. Conseguirlo, por muy difícil que parezca a veces, tampoco es tan complicado.

Estamos en un momento en el que disponemos de más información que nunca para lograr todos nuestros objetivos y eso, en materia de cuidado de nuestra salud, es vital. Es algo de lo que a nadie le queda ninguna duda y que ha implicado mejoras en el estilo de vida de mucha gente, que ahora tiene acceso a información que antes no podía ni siquiera soñar. Eso ha permitido que sepamos, por ejemplo, que la relación entre felicidad y salud es algo todavía mucho más grande de lo que podríamos llegar a pensar y que de la mano de una, suele venir la otra.

En los párrafos que siguen, vamos a comentar algún asunto relativo a esa felicidad y su relación con un aspecto de la salud que tendemos a olvidar en reiteradas ocasiones: la salud dental. Lo vamos a hacer, eso sí, de un modo unidireccional: veremos la influencia que ejerce una buena salud dental en la felicidad de la que podemos ser partícipes gracias a ella. Y es que es tremendo saber cómo pueden cambiar las cosas en la vida de una persona si empieza a cuidar de sus dientes y consigue una mejora sustancial en su higiene bucodental.

Por un lado, mejorar en la salud de nuestros dientes nos sirve para prevenir dolores de muelas, de boca y, por consiguiente, de cabeza o de oído, dos de las zonas que, sin estar directamente ligadas a la boca, sufren las peores consecuencias de nuestra mala salud bucodental. Por otra parte, un cuidado de nuestra boca hace que nuestra imagen sea mucho mejor y que nuestra belleza se potencie, con todas las ventajas que van implícitas a este tipo de cuestiones. La verdad es que, teniendo en cuenta la importancia de la imagen personal a día de hoy, es fundamental que tengamos en cuenta el papel que tiene un cuidado bucodental de primera categoría.

Una noticia publicada en la página web de Infosalus indicaba que la felicidad y la salud componen un binomio necesario para el ser humano, sobre todo porque ya no solo la segunda incide sobre la primera, sino porque la relación también existe si la miramos desde el otro punto de vista: a mayor felicidad, mayor salud. Eso es así si hablamos de la salud desde un punto de vista mental. Y es que no hay que olvidarse que la felicidad es equivalente a la ausencia de estrés, de ansiedad o de depresión, que son males que han ganado mucha presencia en la sociedad española (y también en la europea) en los últimos años.

Una noticia publicada en la web de La Vanguardia informaba de que la felicidad tiene unos efectos en la salud y que el bienestar emocional era clave, por tanto, a la hora de analizar el grado de bienestar físico de las personas. Pero nosotros creemos que los efectos son más fuertes al revés: que el bienestar físico (en el caso que nos atañe, el dental) tiene un papel determinante a la hora de hacer posible que la gente se sienta feliz. Con un dolor de muelas constante, es bastante más complicado conseguir una mejora en términos de felicidad.

La gente, cada vez más consciente

Cada vez son más las personas que saben de primera mano que disponer de una buena salud dental tiene una influencia muy grande a la hora de conquistar aquello que llamamos felicidad. Los beneficios de una sonrisa cuidada (evitar dolores y la potenciación de nuestra imagen personal) hace que nos sintamos más realizados y más cómodos en todos los ámbitos. Y esto está haciendo posible que cada vez más personas se estén poniendo en manos de un dentista, tal y como nos han indicado en una conversación reciente los trabajadores y trabajadoras de Mesiodens.

No cabe la menor duda de que se trata de una noticia excelente, que debemos celebrar y en la que tenemos que seguir trabajando. No se puede bajar la guardia ni mucho menos en lo que tiene que ver con la salud dental de las personas y la influencia que eso tiene en su vida y en su felicidad. Hablamos de un aspecto de la vida que tiene un papel central para cada persona y que debemos inculcar a todo el mundo.